1. capitulo
Por fin de vuelta al instituto, deseaba volver a verlo, estar cerca de el seis horas diarias.
Entre por la puerta de clase junto con Andrea y ahí estaba el leyendo me miro y sonrió, empece a temblar como una tonta y me sonroje como un tomate, lo quería desde hace más de cuatro años, ya no era simplemente una atracción, era una cosa más grande lo que sentía al verlo, estaba completamente enamorada como una tonta, el se llamaba Raúl era alto, guapo, simpático, cariñoso y cada vez que sonreía sentía que todo lo de mi alrededor desaparecía repentinamente, sus ojos oscuros eran difícil de olvidar, los tenia siempre en mente, probablemente los ojos más lindo que jamás pude ver, en fin para mí era perfecto.
Temblando me senté en mi asiento Andrea se sentó junto a mi me dedico una sonrisilla y me dijo
- Valla que buena entrada, empiezas el curso con buen pie ¿eeh?.
- ¡shhh¡ ¡calla¡
- Dios naza pero si a penas levante la voz.
- Por si al caso se entera, ¿te imaginas? Me puse roja y dije. ¡aaaaaiiis diios no quiero ni pensarlo¡
Vi que entro diana una de las chicas más populares del instituto, de pequeñas fuimos inseparables, pero a los seis años se distancio de mi a partir de ahí siempre quiso ser la mejor en todo, siempre intentaba superarme en todo lo que yo hacía, definitivamente era ¡INSOPORTABLE¡
Raùl la vio, cerró su libro y se dirigió a ella rápidamente, le abrazo y le dijo:
- Te he echado de menos
Ella sonriendo y mirándome de reojo dijo
- Yo a ti también.
En ese momento sentí una rabia enorme no podía aguantar más, Andrea me miro y solté el libro fuertemente sobre la mesa originando un ruido desagradable y tremendamente fuerte, Salí por la puerta con los puños cerrados a paso ligero, me senté en el banco que había en el pasillo, las lagrimas se me escapaban de los ojos, tenía una rabia horrible, pensé en darle un puñetazo a la pared pero me contuve.
- Eeei celosilla, que son amigos, nada más ¿eeh?
- Andrea creo que me voy a tener que olvidar de él, ¿Cómo fui tan tonta al creer que un chico así y va a salir con alguien como yo?
- ¡Eeeeh tu¡ como vuelvas a decir eso ¿me oistes? Mírate si eres preciosa.
- Andrea son cuatro años detrás de la misma persona y nada lo único que consigo de él es una sonrisa, hasta ahora con eso me conformaba, pero necesito tenerlo junto a mí, abrazarlo y caminar de su mano.
- Díselo naza no seas tonta ¿Quién sabe? A lo mejor siente lo mismo que tu.
- ¡bien decidido¡ me voy a olvidar de él.
- Naza piénsalo Raúl es diferente a los demás, no lo pierdas, díselo.
- Andrea, esta decidido.
Andrea agacho la cabeza.
- Venga Andrea anda entremos ya a clase.
Me seque las lágrimas y esboce una sonrisa esforzada.
Entre en clase, diana me lanzo una mirada fulminante y sonrió victoriosamente, en ese mismo instante me la imagine como una bruja horrible con su sombrero y su verruga en la nariz, me reí descontroladamente en su cara, en ese instante su asquerosa sonrisa se le quito de la cara y miro hacia el frente. ¡Ahora gane yo¡
Estaba dispuesta a hacerme la vida imposible y sé que no iba a parar, me esperaban miles de aventuras en este curso.
Raúl volvió a mirarme y me sonrió dulcemente, le volví la cara rápidamente, sé que no iba a ser fácil esto, el agacho la cabeza y miro hacia adelante, entro el maestro y para mí fue como si no estuviera, mi mente estaba en otro sitio, pensaba solo en Raúl, lo quería demasiado, era demasiado para mí y sé que esto me iba a costar muchísimo trabajo, de repente el maestro levanto la voz y abaje de mi nube.
- Quedan cinco minuto de clase así que os voy a colocar, así vais a estar para todas las clases ¿de a cuerdo?
- ¡si¡ dijimos todos.
<<Que no me toque con diana, que no me toque con diana.>> Pensaba mientras tanto.
- Raúl. Dijo, mi corazón dio un bote. Siéntate en medio de Nazaret y Andrea
- Bueno me toco contigo
- Le dedique una sonrisa forzada
De repente sono el timbre, bien me libre.
Sali casi corriendo para afuera para coger de la taquilla el libro de la siguiente asignatura.
Estaba en mi taquilla cambiando los libros cuando vi que alguien estaba a mi derecha, mire y… hay estaba el con su amplia sonrisa mirándome, de nuevo empecé a temblar como un flan,<< madre mía es increíble lo que este niño es capaz de hacerme sentir>>pensé.
- Eeei naza
- Hola .dije tímidamente
- ¿te pasa algo?
- No. Agache la cabeza.
Me busco con la mirada, deslizo su dedo índice por mi barbilla y me levanto la cara. Tenía sus labios a centímetros de los míos. Sentí que me daba algo, mi corazón empezó a latir rápidamente y me empecé a sonrojar. –<< madre mía se va a dar cuenta>> (pensé).
- Eeii me tienes preocupado
- ¿preocupado? ¿Por qué? Dije a regañadientes.
- Eres muy importante para mi naza y te noto diferente.
Aparte la cara y le dije rápidamente:
- No, no me pasa nada estoy bien ¡adios¡
Vi que Andrea estaba apoyada en su taquilla que estaba a dos taquillas mas aya de la mía.
- Eres tonta
- ¿Por qué?
- ¿Pero no te das cuenta?
- ¿Darme cuenta de qué?
- Simplemente me ve como una amiga
- Yo creo que no.
- Venga vamos para la clase Cupido.
Andrea se quejo y gruño
- Vengaaa.
El ya estaba en su sitio, ósea junto a mi sitio. No quise sentarme, ya que estaba la bruja diana junto a él hablando, estaban tan cerca, sentía que iba a explotar, quería acercarme agarrarla de los pelos y arrastrarla por todo el instituto, Andrea se acerco a mi oído y me susurro con voz picarona.
- Tengo una idea…
CONTINUARA…
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