lunes, 30 de octubre de 2023

Guerrera.

 

Ella es de las que cada mañana se levanta con un nudo en el estómago y un vacío en el corazón, al poner un pie fuera de la cama nota el dolor de su cuerpo, magullado, dolorido de la guerra diaria a la que se enfrenta, pero se mira al espejo que tanto odia, le sonríe y se coloca la armadura para encaminarse a una nueva batalla.

 Su alma cansada, sus ojeras pronunciadas son las testigos de las lágrimas que cada noche derrama, su mente le traiciona diariamente susurrándole que por mucho que corra jamás va a avanzar y que nunca conseguirá lo que se proponga, el miedo es su mayor obstáculo, ese que lleva colgado a su hombro a todas partes y le acompaña desde que tiene uso de razón.

Ella es una guerrera de esas que sonríen con el alma rota y con brillo en los ojos esperando que mañana la felicidad le acompañe, de esas que lleva mil batallas en su piel y que nunca pierde la esperanza, siempre escucha como si se le fuera la vida en ello y tiende su mano antes de que vayas a tropezar, es una guerrera de las que no se rinden y aun con el corazón hecho añicos se levanta cada mañana para ofrecerle al mundo todo lo bueno que tiene guardado, para gritar al mundo una y otra vez que aunque tropieces la vida es bonita y que puedes correr y correr hasta llegar a tu meta, con marcas de guerra en tu cuerpo, pero esa es la señal de que has luchado hasta el final con éxito.